sábado, 26 de octubre de 2013

Madre luz


Abrir los ojos junto con el alba
es recorrerte en dulce calma,
es estrecharte en un abrazo
y rendirme quieta en tu regazo

Tomar una semilla entre las manos
es acariciar la siega de tus surcos,
es impregnarme en tu simiente
más allá de la misma muerte.

Ver un claro de luna en la montaña
es saborear de la dulce hazaña
de tornar a la niñez y de tu mano
aprender lo que és un  ser humano

Tomar la mano de mi hermano
es tomar de tu misma mano
que en las horas oscuras y frías
amorosamente sostuvieron las mías

Comenzar un nuevo día
vestida con la piel de tu alegría
es disfrutar  pasito a paso
de la llegada del ocaso

¡Es dar el paso con firmeza!,
es arremeter con entereza
entre las sombras de un penar.
Es sonreir,  es evocar, es, ...amar.

Es permitirle al corazón,
en sublime inmolación
regodearse con tu esencia.
Es, tornar a la inocencia
con tu amor como bastión

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